Cuba, una nación en plena guerra civil a la que la UE le da la espalda. Condona las multimillonarias deudas del gobierno tirano. Les apoya con créditos y millones a fondo perdido.
Representantes de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) en Suecia pidieron al Parlamento Europeo que interceda ante las violaciones de derechos humanos llevadas a cabo por el régimen cubano.
La ONU da la espalda a las reclamaciones de DD.HH. en Cuba
En carta enviada a los principales funcionarios del grupo parlamentario, los activistas cubanos informaron sobre el acoso que sufren los miembros de la organización opositora, así como de la situación de los presos políticos en la Isla.
Cuba es una nación en plena guerra civil y “Los miembros de la UNPACU en Suecia estamos impacientes por la pasividad de la Comunidad Internacional ante la creciente violaciones de los Derechos Humanos en Cuba.
El Estado cubano ha amenazado de expropiar a la sede de la UNPACU. El grado de hostilidad por parte de la policía política debe cesar de inmediato. Detienen brutalmente a todo el que visita la sede y los confinan a prisión. El régimen pretende bajo cualquier costo desmantelar la organización. Pedimos por la total libertad de José Daniel Ferrer y de todos los presos políticos que ya sobrepasan 140 casos…”, apunta la misiva.
Represión asesina, violación de derechos de expresión y prisión son los métodos que la UE acepta en Cuba solo por sus intereses económicos.
Los representantes de la UNPACU recordaron que las detenciones arbitrarias y encarcelamientos que se suceden casi a diario en la Isla violan el artículo 9 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Ratificado en su momento por el régimen de La Habana.
El grupo opositor también llamó la atención sobre la situación del preso político Silverio Portal. Quien presenta un delicado estado de salud, y de otros actores de la sociedad civil independiente reprimidos por cuestiones políticas.
“La familia Leyva es amenazada de muerte. Está en huelga de hambre solicitando refugio en los portales de una iglesia católica, en las afueras del Obispado de Holguín, región oriental de Cuba.
La adolescente Tahimí Rodríguez, de 13 años, pide auxilio ante evidencias de que el gobierno quiere matarlas. Los represores han penetrado la casa de la familia destruyéndolo todo e incendiando el interior del hogar”, explica la misiva.
El documento recoge también reclamos sobre el Acuerdo de Cooperación y Diálogo Político con Cuba. El cual -señalan- ha empoderado al gobierno de la Isla y no a la sociedad civil.
La carta denuncia además el desabastecimiento “que vive el pueblo cubano”. Por causa de las “restricciones a los agricultores y pequeños empresarios”. Y “las limitaciones a la iniciativa privada y el control absoluto que quiere ejercer la élite sobre la economía cubana”.
Acoso y derribo de los DD.HH, con la complacencia de la UE.
“El estado confisca medios y hostiga a todos ciudadanos con enormes multas y hostiga a los pocos pequeños empresarios confiscando sus medios. A la luz del gran desabastecimiento agravado aún más por la pandemia, nuestros hermanos en el exilio enviaron varias toneladas de ayuda humana desde Estado Unidos de América que ha sido requerida por el régimen. Abogamos que la ayuda humanitaria enviada por los cubanos desde el exilio se ha entregada a 15 000 familias que se registraron para recibirlas. La ayuda permanece retenida y prácticamente confiscada en la aduana cubana”, añade la misiva, firmada por Jorge Luis Valdés Villazán.